Después de décadas formando parte de la sociedad y participando en su directorio, el Dr. Carlos Guzmán asume como presidente de la organización con una dirección clara: potenciar la inclusividad y dar respuestas a las inquietudes regionales.
Para el Dr. Guzmán el trabajar en provincias fue tan importante como su formación académica porque fue otra etapa de reflexión. Luego de estudiar en la Universidad de Concepción se empleó en Combarbalá, IV región, y quedó fascinado con la zona, tanto que actualmente se desempeña en el Hospital de San Pablo de Coquimbo. “Soy de una generación que cree que uno le debe retribuir a la sociedad lo que ella te ha dado”, dice para explicar por qué decidió desarrollar su carrera fuera de la capital, enfatizando que se considera un provinciano de corazón.
Después de su etapa como médico general en la IV región, donde realizó todo tipo de cirugías complejas, el Dr. Guzmán mantuvo su carrera en provincias como Valparaíso. Es la V región donde fue destinado luego de ganar la beca que lo vinculó con la neurocirugía, específicamente el Hospital Carlos Van Buren, establecimiento que describe como una gran escuela y un lugar de buenos recuerdos. “La vivencia de la medicina en provincia te hace reflexionar acerca de los aciertos y desaciertos, y cómo tú puedes ayudar a mejorar eso. Ser un aporte”, cuenta.
“La medicina es un arte, por lo tanto tenemos que aplicar el arte”, reflexiona Guzmán, destacando que según su visión el médico debe ser una persona que vea el mundo en la dimensión humana más global, por lo que para el especial grupo de profesionales que componen esta comunidad es positivo reunirse con sus pares, compartir conocimientos, experiencias y sueños.
Para esto es que existe la Sociedad de Neurocirugía de Chile según su nuevo presidente y el hecho de sustentar el cargo “es un honor porque uno va a servir a los colegas, va a ser el pivote o el elemento en el cual se puedan sustentar algunas inquietudes y hacerlas realidad”.
Cuando habla de los avances de la neurocirugía y lo que se viene para la especialidad, el Dr. Guzmán es altamente positivo y tiene grandes expectativas para la ciencia. “La velocidad del aumento de conocimiento –que antes se doblaba cada 50 años– hoy se dobla cada cinco”, dice e insiste que como profesionales de la medicina deben estar permanentemente encima de los nuevos estudios. Entre los avances que ve para diez o veinte años más está la robótica, la biotecnología y la genómica: “Hoy día tú tienes un paciente que sufre un accidente, queda tetrapléjico y permanece tetrapléjico. Qué nos dice que en diez años o en veinte, por todo este crecimiento de conocimiento, no vamos a tener una respuesta. En la terapia génica, por qué no vamos a encontrar una mucho mejor respuesta a lo que es el tratamiento oncológico o el tratamiento quirúrgico propiamente tal con apoyo de la robótica”.
Para estos nuevos avances que vienen, el Dr. Guzmán cree que las nuevas generaciones serán fundamentales para ayudar a la población con una mirada más moderna. Sin dejar de lado las formas tradicionales, pero con un apoyo distinto. Por eso la formación de nuevos neurocirujanos también es muy importante para el nuevo presidente de la sociedad, razón por la cual está en constantes conversaciones con el gobierno y las cabezas de distintos recintos de formación: “Ver cómo podemos aportar algo desde nuestra mirada como especialistas en la formación de profesionales. En relación a la calidad de la formación y en cuanto a cubrir demandas que existen en las regiones. Esos son los puntos”.