Se fue uno de los neurocirujanos más grandes en la historia de la neurocirugía moderna, no porque fuera su fellow (en el año 1998). Era una persona a veces difícil o distante en el día a día y extremadamente exigente. Tenía su lado bueno conocido por muchos y su lado malo que conocimos los más cercanos, pero el Prof. Dr. Evandro de Oliveira es una persona de las que son imprescindibles, que luchó toda su vida por la neurocirugía y se fue luchando contra una enfermedad terrible como lo es la esclerosis lateral amiotrófica que le quitó una de las cosas más bonitas e importantes que él tenía, su voz. Con su voz, él lo convencía a uno. Al escucharlo en 1996, me convenció que la neurocirugía vascular, la neuroanatomía microquirúrgica y la microcirugía eran lo más lindo dentro de la neurocirugía y lo sigo pensando después de más de 20 años, él entró a lo más profundo de mi alma.
Nosotros trabajamos mucho con el Dr. Evandro durante toda mi carrera desde 1998, después de regresar de Brasil seguimos trabajando en más de un centenar de revisiones de revistas y tuve el honor de escribir artículos con él. No tuve la suerte que tuvieron otros de ser fellow de Rhoton pero siempre mantuvimos un contacto y un respeto mutuo. Él vino a Chile en el año 2000, cuando presenté mi trabajo de ingreso a la Sociedad de Neurocirugía de Chile, y vino muchas veces como invitado a nuestros congresos, nunca se negó, siendo nombrado Miembro Honorario Extranjero el 2007. Vino también al último Congreso Latinoamericano realizado en Chile en el año 1998, teniendo la suerte que me trajera con él para que le ayudara en las diferentes cosas, me hizo sentir importante conociéndome sólo por unos meses.
De izquierda a derecha: Dr. Rokuya Tanikawa, Dr. Jorge Mura, Dr. Evandro de Oliveira y Dr. Pablo Rubino.
Era una persona extremadamente generosa, una persona que sabía ayudar a todos aquellos que quisieran mejorar dentro de la neurocirugía y era intolerante con la mediocridad y el conformismo. Puso a la neurocirugía latinoamericana en el mapa a nivel mundial.
Me produce un tremendo vacío que él no esté. Tenemos grandes amigos que están sufriendo más que el que suscribe, como Pablo Rubino por ejemplo que era una de sus discípulos más cercanos y su hijo neuroquirúrgico, también grandes colaboradores en Brasil como Helder Tedeschi y Wen Hung Tzu.
El Dr. Evandro fusionó de manera muy clara la Microcirugía de Yasargil, que era el mejor microcirujano reconocido por Yasargil y por otro lado la Neuroanatomía de Rhoton que es la clave para hacer una buena neurocirugía.
Dejó un legado muy importante en la neurocirugía latinoamericana y en la neurocirugía mundial y es el deber de nosotros quienes fuimos sus discípulos y de cualquiera que ame la neuroanatomía que ame la microcirugía, que ame la neurocirugía vascular o la cirugía de la base del cráneo o incluso solamente una buena neurocirugía, hacer las cosas bien, porque hay incluso discípulos de él que se dedican a la columna a la neurocirugía funcional a todos los aspectos de la neurocirugía, sino que la filosofía es hacer las cosas bien, hacerlas con pasión, saber discutir, saber defender, saber respetar a los demás, y sobre todo tenerle mucho amor a la neurocirugía.
El Dr. Evandro era una persona con un tremendo carisma y lamentablemente al final de su vida, perdió la voz, pero nosotros en las diferentes actividades que ha habido en su honor, como en San Diego en un Simposio que realizó la Sociedad Americana o en el Laboratorio de Microcirugía de la Beneficencia Portuguesa de Sao Paulo que ahora lleva su nombre, éramos la voz de él con todos los pacientes que hemos operado, con todas las personas que hemos ayudado y todos los colegas neurocirujanos que hemos formado.
Por último, terminar diciendo que el Dr. Evandro estaba obsesionado con enseñar, obsesionado con registrar todas sus cirugías para mejorar de sus errores (muy escasos si es que existían) para después hacer diferentes cursos que tuve la suerte de hacer. Esa misma pasión de formar fellows, pasantes, etc, la adquirí y traté de hacerlo acá en Chile y replicarlo y eso me convirtió en Maestro de la Neurocirugía, el año pasado, gracias por eso Dr. Evandro.
Por lo tanto, el legado de él no solamente es en Brasil sino que es internacional, nosotros acá en Chile claramente tenemos la influencia del Dr. Evandro en el fellow y pasantías que creé desde el año 2000, pronto seremos 50 acá en nuestro país.
Creo que es una enorme pérdida, pero el Dr. Evandro es inmortal porque él siempre estará en cada una de las cosas que nosotros hagamos y las nuevas generaciones nunca lo van a olvidar porque nosotros nos encargaremos de que eso no ocurra.
Tengo una tremenda pena, hoy en forma muy circunstancial en el día que me avisan que el Dr. Evandro había fallecido operé una malformación arteriovenosa cerebral que era la patología que al Dr. Evandro más le gustaba, él me manda un mensaje desde el cielo de que tengo que persistir; traté de hacer la cirugía lo más parecido a lo que la hacía él, por supuesto él era un artista yo soy solamente un neurocirujano, bueno pero de alguna manera al operar justamente la patología que más le apasionaba el día que él nos dejó, para mí es un signo de que, así como me dijo él que yo era un “Evandro´s Boy”, él me manda a decir desde el cielo que debo persistir en lo que estoy haciendo y de la misma manera debo hacerlo en la neuroanatomía, en la microcirugía y en la enseñanza que son las grandes cosas que aprendí del Dr. Evandro. Su generosidad es enorme, no voy a ser el único que lo va a decir, pero tuve la suerte de estar con él en un momento difícil el año 1998 y ser muy cercano a él durante todo el resto de mi carrera lo cual me permite ser el neurocirujano que soy hoy.
No me queda más que agradecer de haberlo conocido, no me queda más que agradecer los momentos buenos y los momentos no tan buenos que pasé con él que me enseñaron muchísimo. En la suma y resta el Dr. Evandro es un crack, es un gran neurocirujano, una gran persona y es de aquello que nosotros llamamos imprescindibles. Es nuestro Maradona (o Pelé)….nos dejó el más grande.
Prof. Dr. Jorge Mura Castro.
Maestro de la Neurocirugía Chilena.
Profesor Titular de Neurocirugía. Universidad de Chile.
Instituto de Neurocirugía Asenjo.
Vicepresidente de la Sociedad de Neurocirugía de Chile.